Fueron 14 inigualables años. Mi perrito se fue, durmiendo y en paz. Mi alma está vacía. Ahora no me queda más que mirar alrededor y si comparo lo que veo con toda la sabiduría de Bubu, solo queda imperfección, insensatez, incertidumbre, miedo y alguna que otra sonrisa inteligente... Lo echo mucho de menos.
El mundo, al igual que una obra de arte, provoca emociones, reacciones y sentimientos. He decidido que éste sea mi refugio intelectual, para poder compartir con el visitante inesperado, mi manera de ver y entender lo cotidiano, lo mundano y la vida.
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Hola Bettina, guapa, cuánto lo siento. A mí se me fué en noviembre pasado Okupita, que no sé si llegaste a conocerle pero es el pastorcito rubio de la foto de mi facebook. Supongo que estarán todos juntos, con Canito y demás buena compañía, felices en algún lugar mejor que éste absurdo mundo en el que vivimos pero, nosotras, desde aquí, les echamos mucho de menos aunque otras criaturitas guapas y lametonas nos aguarden en casa. Muchos besos guapa.
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